1ª Jornada Grupo B

Macedonia 30-28 Chile.
Un partido igualado fue el que se disputó para inaugurar el mundial de balonmano en el pabellón de San Pablo en Sevilla. Fue un partido de alternativas en el que a cada varios minutos parecía que iba a ganar una selección y luego la otra conseguía ponerse por delante.
Fue un partido de gran intensidad en el que se impuso la mayor veteranía de los balcánicos y los goles de Lazarov llevarón a Macedonia hacia la victoria. En los primeros minutos Macedonia colocó una fuerte defensa que no permitía a Chile atacar como desearían, aunque las paradas de Oliva hicieron que Macedonia no se despegase en el marcador. Impulsados por su guardameta los chilenos se vinieron arriba y consiguieron ponerse por delante en el marcador. Macedonia no decayó y gracias a su extrella Kiril Lazarov consiguieron una rente de +6. Los errores en los pases de Macedonia dieron vida a Chile que consiguió ponerse con 21-19 en el marcador. Los siete metros y el acierto de Lazarov finalmente llevaron a Macedonia hacia la victoria.

Islandia 25-30 Rusia.
Otro partido igualado pudieron presenciar los espectadores en el San Pablo. El marcador final no refleja en absoluto la igualdad durante los 60 minutos.
Rusia consiguió un primer parcial en el que consiguió desprenderse en el marcador. Esta renta la consiguió con una defensa cerrada islandesa que no era capaz de parar las envestidas rusas. Cuando, por fin, Islandia consolidó esa defensa comenzó a remontar y se puso por delante en el marcador. La defensa rusa no funcionaba como antes aunque consiguieron aguantar para irse con un 13-14 en el marcador al descanso. La segunda parte fue muy similar a la primera. Los islandeses gracias a su potente defensa se marcharon en el marcador. Tras continuas alternancias en el marcador gracias a grandes parciales de ambos combinados. Finalmente tras el último parcial ruso, estos consiguieron ganar el partido por 25-30.

Dinamarca 41-27 Qatar.
Sin ninguna historia el partido que cerraba la primera jornada del Grupo B. Una potente Dinamarca se impuso a una Qatar para la que ya es un premio haber llegado hasta aquí.
La altura danesa que contrastaba con la altura de los jugadores qatarís resultó definitivo. Dinamarca se permitió el lujo de no alinear a Mikkel Hansen. La disciplina de Qatar aguantó al principio a los daneses aunque las paradas de Landin desequilibraron el partido a favor de los daneses. Fue un partido cómodo para los daneses que ya piensan en el difícil partido contra Rusia.